Detección de patologías congénitas en el recién nacido
Valeria Dimangano -Médica Oftalmóloga - Especialista en Oftalmología Infantil Servicio de Oftalmología Sanatorio de la Mujer Fisherton
El primer mes de vida es clave para la detección de patologías visuales congénitas y del desarrollo
La realización de estudios en los recién nacidos, en especial, el examen oftalmológico con fondo de ojo, permite detectar patologías congénitas (con las que el bebé nace) y patologías del desarrollo (que evolucionan a medida que el niño va creciendo). De no ser detectadas a tiempo, estas patologías tienen pronósticos poco alentadores.
Es común que las madres y padres duden mucho antes de llevar a los bebés a un oftalmólogo. Lo cierto es que gracias a las consultas de recién nacidos es posible encontrar cataratas congénitas, patologías corneales, glaucoma, cicatrices y enfermedades retinales, tumores, entre otras.
Fondo de ojo y estudios complementarios
En niños nacidos a término, el fondo de ojos descarta malformaciones retinocoroideas y del nervio óptico, infecciones intrauterinas de la parte posterior del ojo, incluidas bajo la denominación TORCHS (toxoplasmosis, rubéola, citomegalovirus, herpes, sífilis, HIV) que acarrean consecuencias devastadoras no solo para la visión, sino también para la vida del niño. Para advertirlas, el primer paso es la realización del fondo de ojo y el segundo, la puesta en marcha de estudios complementarios.
La importancia de la realización de estos exámenes es mucha, razón por la cual en poco tiempo en la Argentina se convertirá en ley un proyecto que impulsa la obligatoriedad de realización de fondo de ojo a los recién nacidos en todos los centros de salud.
El proyecto de ley de exámenes para recién nacidos se puso en marcha hace muchos años y ha sufrido múltiples modificaciones. Esto no quiere decir que no sea bueno. Lo que ocurre es que debemos planteamos la posibilidad de implementarlo en todos lados, fundamentalmente por un tema de recursos, los medios necesarios y el personal capacitado.
Primer examen del neonatólogo
Los recién nacidos son examinados en primer término por el neonatólogo, quien constata que los ojos sean normales, es decir que el tamaño sea adecuado y similar, y que los párpados no presenten anormalidades. Pero, también deben realizar el llamado ‘estudio del reflejo rojo’, en el cual se ilumina con una luz fuerte el ojo a través de la pupila, observando el reflejo rojo que genera la retina iluminada, comprobando de esa forma que el eje visual está libre.
No obstante, la parte interna o no visible del ojo también debe ser evaluada por un oftalmólogo pediátrico, dado que este examen nos permite comprobar que no haya malformaciones intraoculares de retina y del nervio óptico, tumores congénitos intraoculares, posibles secuelas de enfermedades infecciosas en el embarazo, como toxoplasmosis o rubeola, cataratas congénitas, etc. Este análisis se realiza con dilatación pupilar.
Exámenes recomendados
Tanto la Academia Americana de Oftalmología (AAO) como la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) recomiendan la realización de los siguientes exámenes de rutina, entre el nacimiento y los seis meses de vida:
- reflejo rojo y corneal
- inspección con fondo de ojo.
- Por su parte, antes de los 3 años hay que completar con reflejo rojo y corneal, alineamiento ocular, fijación y seguimiento e inspección con fondo de ojo.