Ronquidos: ¿Cuándo realizar una consulta médica?

Se estima que un 40% de los adultos sanos ronca ocasionalmente

La medicina de los trastornos del sueño es una especialidad clínica que aborda el diagnóstico y el tratamiento de los pacientes que sufren alteraciones del sueño nocturno, somnolencia diurna excesiva o cualquier otro problema relacionado con el sueño. 

El espectro es muy amplio e incluye los de carácter menor como los desfases horarios, hasta cuadros de mayor importancia que pueden desencadenar en accidentes de tránsito como ocurre en pacientes con apneas de sueño que se duermen al volante.

Las disfunciones pueden ser primarias, con afectación de los mecanismos neurales básicos del sueño y la vigilia o secundaria a otros problemas de tipo físico, psíquicos, neurológicos. 

Es imprescindible estudiar al paciente mientras duerme y también evaluar el impacto del sueño sobre las funciones que se desarrollan en la vigilia.

Asimismo, es de vital importancia conocer que los trastornos respiratorios del sueño se relacionan de forma directa o indirecta con el funcionamiento del sistema cardiovascular, la conducta, atención y memoria entre otros aspectos y mecanismos neurofisiológicos.

En este sentido, encontramos el ronquido, que es un ruido respiratorio fuerte que ocurre durante el sueño, cuando el flujo de aire encuentra algún grado de obstrucción o resistencia al pasar por detrás de la cavidad bucal o la nariz. Se estima que un 40% de adultos sanos ronca ocasionalmente y un 20% lo hace habitualmente; es más frecuente en hombres, personas con sobrepeso y mujeres post-menopáusicas. Se estima que un 10% de niños también ronca.

Los factores que pueden empeorar el ronquido son el sobrepeso, tabaquismo, alcohol, ansiolíticos /sedantes, el decúbito supino y la ingesta de comida abundante.  

¿Una molestia social o una enfermedad?

El ronquido no necesariamente significa que la persona que lo padece tiene un problema, aunque como mínimo pone en evidencia al roncador y perturba el sueño de los demás.

Las personas que roncan descansan mal y tienen en general un sueño más superficial que el resto. Pueden estar asociados a apneas/hipopneas de sueño. 

La apnea (pausa respiratoria durante el sueño) y la hipopnea (descenso de la respiración durante el sueño) pueden ocurrir muchas veces a lo largo de una noche, constituyendo el síndrome Apneas/hipopneas obstructivas del sueño (SAHOS).

¿Cómo se da cuenta una persona que padece un posible SAHOS? 

Durante el sueño

• Ronquidos todas o casi todas las noches.

• Pausas o descensos respiratorios durante el sueño por unos segundos (contado por compañero de cama).

• Movimientos frecuentes de miembros superiores o inferiores.

• Despertarse varias veces para orinar.

• Despertarse con sensación de ahogo.

• Cefalea matinal. 

Durante la vigilia 

• Somnolencia diurna excesiva.

• Irritación faríngea o sequedad bucal al despertar.

• Fatiga, cansancio y falta de energía.

• Déficit de atención, concentración y memoria.

• Irritabilidad, reducción de la motivación.

 Un diagnóstico acertado  

El método oro para el estudio, diagnóstico y definición de la conducta de tratamiento de ésta y otras patologías relacionadas es la Polisomnografia. La misma se basa en el monitoreo, registro y análisis de parámetros fisiológicos que incluye: evaluación de las etapas de sueño, electrocardiografía, flujo respiratorio, esfuerzo torácico y abdominal, oximetría de pulso, sensor de movimientos de las extremidades y micrófono para ruidos respiratorios (ronquidos), entre otros.