¿Cuáles son los síntomas de la adicción al juego?

La negación, los cambios en el carácter, realizar actos extremos para conseguir el dinero y las tendencias suicidas son las señales más alarmantes.

Las adicciones del siglo XXI evidencian modalidades que nadie imaginaba a fines del siglo pasado. Al consumo tradicional de alcohol y tabaco se ha sumado vertiginosamente el de drogas ilegales como marihuana, cocaína, ácido lisérgico (LSD), éxtasis y diversas metanfetaminas o “drogas de diseño” de manera alarmante y en edades precoces desde inicios de la adolescencia; muchas veces en modalidad de policonsumo combinando varias sustancias al mismo tiempo con incremento de riesgos y daños orgánicos.

Actualmente también debemos prestar atención a las llamadas adicciones comportamentales o “no químicas” como son la ludopatía o juego compulsivo, la chatmanía y webmanía en redes sociales, los trastornos alimentarios y atracones, el gasto y compras compulsivas, y la lista sigue.

Respecto al juego compulsivo o ludopatía debemos hacer mención al crecimiento de las apuestas durante los últimos años en las diversas modalidades tanto en casinos, hipódromos, loterías tradicionales  como las apuestas en sitios de internet donde alcanza con la tarjeta de crédito para iniciar una carrera que generalmente termina con deudas imposibles de saldar. 

En estas alternativas de juegos y apuestas on-line muchos jóvenes pueden ingresar vulnerando la contención familiar por lo que es imprescindible la involucración preventiva de los adultos ya que rápidamente se transforman en compulsiones adictivas de consecuencias inimaginables.

Mientras tanto los adultos tampoco quedan liberados de estos riesgos de quedar atrapados por las redes de juego. En nuestro país se calcula que el 1% de la población adulta padece muy graves problemas con el juego, aunque muchos más presentan diversos síntomas que conviene atender ya que de no tratarse a tiempo, podrían desembocar en aquellos casos más graves con quiebres financieros, familiares o de salud hasta llegar a poner en riesgo la vida.

La adicción al juego puede parecer menos grave que el alcoholismo o la drogodependencia, sin embargo es la más relacionada con los intentos de quitarse la vida.

Señales de una adicción

Estos síntomas o señales que debemos atender precozmente son:

No poder detenerse. Además del dinero también se pierde la noción del tiempo porque la persona resulta ser incapaz de levantarse de la mesa, virtual o real. 

Jugar con dinero que no debería perder. El juego sano es apostar solo el dinero que está previsto gastar ya que si comienza a preocuparse por una hipotética pérdida vamos por muy mal camino. El caso extremo es jugar con dinero prestado.

No disfrutar de las apuestas. Pensar en gastarse unos pesos en el juego debería ser igual que hacerlo en el cine, en un recital o en una salida con amigos. Si el juego y las apuestas se transforman en una vía de escape con actitud compulsiva y no de ocio, también estamos en grandes problemas.

Seguir jugando para recuperar lo perdido. Es una de las peores situaciones aunque es muy frecuente que suceda “creyendo” que se puede cambiar la suerte; esto lleva a cometer errores cada vez mayores que solo aumentan las pérdidas cada vez más.

Cada vez se apuesta más dinero. Porque la adrenalina que genera el juego impulsa a jugar cada vez más dinero para seguir sintiendo lo mismo; esto significa que ya se ha convertido en un adicto del azar.

Hacer cualquier cosa para conseguir dinero para el juego. Es un síntoma extremo más allá de cuestiones morales y penales, ya que robar, engañar y recurrir a cualquier tipo de acto para acabar jugándolo no solo es un gran error, sino que se ingresa en un camino de muy difícil retorno.

Anteponer el juego a otras cosas importantes. Perder el acto escolar, la visita al médico o eventos familiares por hacer algo que está abierto prácticamente las 24 horas es claro que estamos frente a un problema muy grave.

El juego afecta el carácter. Cuando ya  no se disfruta sino que se sufre y los demás ven que se está aislando, siendo irritable con impulsividad creciente.

La negación. Es una gran dificultad para distinguir las señales de alerta siendo el momento que la familia y amigos deben realizar la consulta muy precozmente.

Tendencias suicidas y escaso apego por la vida. Es una situación límite y generalmente ocasionada por grandes deudas.

Finalmente la adicción al juego puede parecer menos grave que el alcoholismo o la drogodependencia, sin embargo es la más relacionada con los intentos de quitarse la vida.

Más información: www.avcd-argentina.org